Todo en esta vida, desde que llegamos a este mundo es un constante servir, y desde niños aprendemos a hacerlo, con nuestras travesuras, nuestros juegos servimos para alegrar a nuestros padres a nuestros mayores, inocentemente estamos cumpliendo con el apostolado de servir,EL PLACER DE SERVIR
(Escrito por nuestro amigo
Victor Manuel Olvera de santiago)Nuestra vida infantil y de adolescente se desarrolla en un constante servicio, lo hacemos al estudiar, al cumplir con las mas sencillas tareas que nos son encomendadas, y si lo hacemos con gusto, esto es mas gratificante afán para el que sirve, como para el que recibe el servicio,
Ya en nuestra vida adulta, seguimos sirviendo, bien sea en nuestra profesión, o en nuestra diaria labor, claro aquí lo hacemos ya por un interés, por una paga por algo personal y muy propio, pero seguimos brindando servicio, a nuestra familia, a nuestros patrones, nuestra comunidad, y por añadidura a nosotros mismos.
Es por ello que nunca debemos de renegar de nuestra misión de servir, siempre hagámoslo con alegría, recordemos aquella máxima, no hay mas placer que agrade tanto al ser humano que el de servir, pues el que no vive para servir, no sirve para vivir.
Queridos amigos, hagamos de nuestra vida un manantial de servicio, que nuestra misión, en esta vida, sea la de servir, recuerden que solo pasaremos una sola vez por esta vida, y que a nuestra partida, se nos recuerde por nuestra obra, que al final de todo, de nosotros quizás quede eso, un recuerdo.
Victor Manuel Olvera de Santiago.