TE FUI INFIEL Y AUN ASI CORRES A MIS BRAZOS
(Escrito por nuestra amiga Claudia Patricia García)
Te fui infiel y aun así corres a mis brazos….

Fui egoísta contigo, después de que tu amor fue sincero, entregado, único, preferí envolverme en mentiras, en engaños, en traición y falsedad.

Te fui infiel, busque en otro lugar la felicidad que tu me ofrecías, quise encontrar en otros brazos, la plenitud que tu me dabas. Con sus besos borrar la esperanzas que había en ti, y sus caricias, esas caricias, que marcaban mi cuerpo, solo hicieron que no pudiera aprecia las tuyas, que ya no sitiera lo mismo en tu presencia.

Fui infiel, falsa, traicionera, cambie lo sagrado, por lo profano, lo puro por lo impuro, la dicha por la tristeza. La vida por la muerte. Pues es una muerte que me consume, una muerte que no puede terminar que no puede llegar a su fin. Estoy muerta en vida. Por haberte sido infiel. Por haber abandonado la promesa de amor que te había hecho.

Ya nunca podría decirte mi amado, mi añoranza, mi sueño, mi anhelo, ya nunca más podría volver a tus brazos, y sentí esa sensación de dicha plena en Ti. Ya no soy merecedora de la nada, de la plenitud, de la felicidad, del amor. De Ti. De lo que fue alguna vez lo más maravilloso de mi vida, lo que me llenaba, me alimentaba día tras día. Lo que así que mi vida tuviera sentido. Ya no existe, ya puede haber vuelta atrás, como olvidar, la traición, el engaño, las mentiras. Ya no puedo volver a TI. Existe un gran abismo entre los dos. Que no puedo cruzar que no puedo llegar nuevamente a TI.

Y como podría yo atreverme a ir nuevamente a tu encuentro, si no soy merecedora de nada, si no soy capaz de ser y hacer feliz alguien mas, y solo fue un momento de ausencia, que me marco mi vida, tonta de yo, que busque encontrar en algo incierto la felicidad que ya poseía, una pequeña aventura, hubiera imaginado, que marco mi cuerpo y mi alma para siempre, y ahora ni siquiera puedo contemplar tu mirada, esa mirada que me llenaba de paz y dicha, esa mirada que solo con sentía hacía que mis problemas terminaran, que mi cansancio se desvaneciera, que la incertidumbre desapareciera.

Solo quiero despedirme, verte solo una vez más, aunque no sea de frente, aunque sea lejos, pues no quiero que tu me vas, no quiero que sepas, la infelicidad que hay en mi, prefiero que me recuerdas como era, que recuerdes que te amaba, que estaba a tu lado, que eras lo mas importante en mi existencia. Pero necesito solo ver nuevamente esos ojos compasivos y misericordiosos. Me ocultare, para verte de lejos, no haré ruido, para que tus oídos que siempre fueron atentos a las necesidades de los demás no me escuchen. Y tus brazos, esas caricias que reconfortaban todo, que convencían hasta el mas despreciable ser, para ser tocados por ti. Tonta de mi, deje lo mas por lo menos. Que arrepentimiento mas doloroso, pues ya no puedo verte. Menos estar a tu lado. Que dolor, que tragedia, embarga mi vida. Y te veo frente a mí, escondida, para que no me mires, y escuche tu voz. Y que hago, esa voz me penetra, no quiero mirarte, no quiero que tú me mires, no quiero que sepas que estoy aquí, aunque tampoco me quiero ir. Y me llamas, y me buscas. Y me dices con dulce voz, mi amada, y esas palabras penetran mi alma y mi corazón, te he hecho tanto daño, y tú me sigues llamando así. Quisiera pensar que no te diste cuenta, pero como si tú lo sabes todo, aún el más pequeño de mis pensamientos está en Ti. Que hago, donde me escondo donde no puedas escucharme, donde no me puedas encontrar, donde no te pueda seguir lastimando. Quiero una nueva oportunidad, pero porque me la darías, si te he hecho tanto daño, si no puedo olvidar mi pasado, como lo harías Tu, si mejor que yo, lo conoces.

Mi amado, mi esencia, mi añoranza. Como perder estos recuerdos, de mi vida. Como volver a decir que no ha pasado nada, como olvidarme de ello, como evitar que siga penetrando mi vida.

Escucho a lo lejos una respuesta que no puedo aceptar, que mi corazón añora, pero que no cree que pueda ser real.

“Aun así te amo, y te quiero a mi lado. Y aunque me fuiste infiel, quiero abrazar nuevamente tu vida.”

Es la respuesta de mi amado, con palabras sencillas y penetrantes. Cual será la mía ahora? Después de amarlo tanto, de traicionarle, será capaz de amarme nuevamente. O será que yo no soy capaz de confiar en mí. En perdonarme y volver a El.
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