Es una historia verídica de mi vida y lo escribió mi hija mayor, desde el fondo de su corazón; Dios siempre esta de alguna manera presente en nuestras vidas y no lo queremos ver. Saludos y que Dios les colme de bendiciones.EL ANGEL QUE LLEGO DEL CIELO
(Escrito por la hija mayor de Miriam Cruz Ruiz)Era de noche y el silencio invadió el miedo, solo alcanzaba a ver el dolor que sentía mi mamá, en la sala esperaba a que se le pasara el dolor.
Solo escuché que tu papá dijo, me llevaré a su madre al hospital para que la revisen, en ese instante, la preocupación se apoderaba de mí.
Pasaban horas y después de un rato llegaron, preocupados pero a la vez felices, pues tú estabas a punto de nacer. Dieron las tres del la mañana, y de regreso al hospital, mientras esperábamos a que dieran las siete para ir al hospital.
Al llegar, tu papá me dijo, están esperando a que empiecen las contracciones. Mientras pasó el tiempo, sentados en aquellas sillas que se encontraban fuera del hospital.
Entusiasmados y por supuesto contentos esperando que nacieras, eran las dos de la tarde y la doctora salió a darnos el informe, escuché muy atentamente, que tú fuiste niña, pero, que había un pequeño problema…
Al poco tiempo subió tu papá a verte, y después a ver a mi mamá, mientras tanto yo esperaba a ver que sucedía. Al notar a tu papá triste de semblanza y cabizbajo, pensé que algo estaba mal.
Nos informó en el estado que estabas, mis ojos se inundaron repentinamente y rodaron lágrimas por mis mejillas, no podía creer lo que acababa de escuchar, era como si en ese instante mi mundo se derrumbó.
No entendía por qué pasaba esto, al llegar a la casa platicamos con respecto a lo que parecía el problema, luego nos fuimos a descansar después de un rato tocaron la puerta, eran mis tíos sentí un gran alivio al verlos y saber que teníamos su apoyo, les informamos todo lo sucedido e hicimos una oración.
Al escuchar las palabras de mi tía, fue entonces cuando comprendí el por qué Dios nos mandó a una bebé especial, y que más que nada teníamos que darle todo el apoyo a mi madre, ya que ella se sentía muy mal, sentía gran culpabilidad.
Ahora sé que los niños con SINDROME DE DOWN, son más especiales que los que dicen ser gente normal y tú eres ese pequeño ángel que ha llegado a mi vida.
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