EVITA EN CASA TIRAR LA COMIDA
(Publicado en el periódico El Norte)
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Todavía existe una cultura en la que, sin pensarse mucho, se lanza al bote de basura lo que aún pudiera consumirse.  Afirman que 30 por ciento de alimentos se desperdicia. Recomiendan el envasado y la deshidratación como técnicas de conservación.

Daniel Santiago
 

Monterrey,  México (15 junio 2011).- Cuando la FAO reportó este año que, de los alimentos que se producen anualmente en el mundo, un 30 por ciento se pierde, el organismo de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación se refería al desperdicio que se genera en el campo, en el mercado... y en las cocinas de las casas.

Y aunque buena parte de estas pérdidas son durante la cosecha y el almacenamiento, por inundaciones, siniestros o plagas, otra parte importante se da en los hogares por falta de planeación a la hora de hacer el súper o por deficientes prácticas de conservación.

Según la Asociación Mexicana de Bancos de Alimentos, en el País diariamente se tiran más de 31 mil 500 toneladas de alimentos, principalmente en campos agrícolas.

La FAO señala que en países en desarrollo, como México, más del 40 por ciento de las pérdidas de alimento se dan en los niveles posteriores a la cosecha y procesamiento.

Y aunque hay una mayor tendencia a tener cuidado con los alimentos que se compran, todavía existe una cultura en la que, sin pensarse mucho, se lanza al bote de basura lo que aún pudiera consumirse.

Manuel Zertuche Guerra, director de la División de Biotecnología y Alimentos del Tec de Monterrey, se pronuncia por respetar las fechas de caducidad, al mismo tiempo que señala que hay productos que se pueden consumir llegada la fecha, pues lo único que pierden son algunas de sus propiedades.

"En una caja de galletas o en otro producto similar, no es tanto que la fecha de caducidad determine que el producto se eche a perder, sino más bien es para óptimas características cualitativas, es decir, que la textura, el sabor, lo que esperes del producto, no se altere. No es que se echó a perder, sino que ahora ya varió la textura y sabe de otra manera".

Con productos lácteos el margen de caducidad es muy reducido, pero aún así, el alimento puede aprovecharse, afirma el investigador Miguel Angel Martínez Téllez.

"Puedes hacer yogurt con esa leche. Es sencillo", dice el coordinador de Tecnología de Alimentos de Origen Vegetal en el Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo, en Hermosillo.

"No es que la leche ya esté echada a perder, sino que empieza la fermentación. Si se mezcla con otro bote de yogurt que trae los microorganismos que van a fermentar la leche, se acelera el proceso y en lugar de tener un frasco de 50 ó 100 mililitros de yogurt, entonces tienes un litro".

Para evitar el desperdicio de comida, Martínez Téllez recomienda volver a las técnicas de conservación que los abuelos utilizaban, como la deshidratación y el envasado, y no valerse solamente de la refrigeración.

"Si tienes duraznos, manzana o calabaza, las puedes preparar en rebanadas y secar al sol para deshidratar el producto, y el producto dura deshidratado más de un año, y mantiene sus propiedades nutricionales.

"Otra tecnología es el envasado de alimentos, al hervir los frascos y sellarlos puedes conservar alimentos, chile, tomate, calabazas, hacer conservas".

Son prácticas ligadas a quienes viven en el campo, apunta Martínez Téllez, aunque ya en las ciudades hay quienes han decidido instalar su pequeña parcela de tomate y chile, por ejemplo.

Si después de la comida, en el lonche de la escuela o tras una fiesta, el desperdicio es inevitable, la práctica de separar la basura orgánica de la inorgánica debería de comenzar a desarrollarse en las casas, recomienda Zertuche Guerra, pues solamente el 3 por ciento de los alimentos que se desperdician son reutilizados, como abono, en la cadena de producción.
 

Cultura necesaria

El cuidado de la comida es una cadena que inicia antes de hacer el súper, indica la nutrióloga Blanca Castillo Treviño, del Banco de Alimentos de Cáritas de Monterrey, quien recomienda no excederse en las compras.

"Comprar sólo lo necesario para las preparaciones a realizar con base en los miembros de la familia, ya sea por semana o por quincena, refrigerar o congelar bien los alimentos y conservarlos en recipientes adecuados", comenta.

"No adquirir alimentos que estén golpeados en sus empaques. En caso de las frutas y verduras, si las vamos a almacenar podemos optar por las que no han madurado aún. Checar que las carnes y pescados estén en óptimas condiciones verificando su olor y color".

Ya en el hogar aplican medidas muy sencillas, pero que a veces se olvidan, como sacar del refrigerador sólo lo necesario, preparar la cantidad suficiente para las personas que comerán en casa y, en caso de que sobre, tomar en cuenta que es de alrededor de siete días la duración adecuada.

Esto siempre y cuando se haya enfriado antes de refrigerarse o congelarse, dice la nutrióloga.

Pero el llamado de los especialistas es reflexionar sobre la cantidad necesaria y el manejo de comida en el hogar, para así evitar que las cifras de desperdicio de comida sigan en aumento.

Castillo Treviño apunta que fue precisamente el contraste entre el desperdicio de alimento y la pobreza alimentaria en México lo que dio origen al Banco de Alimentos de Cáritas, en Monterrey, hace 22 años.

"Para poder canalizar el alimento de manera digna a instituciones de asistencia social como orfanatos, albergues, asilos de ancianos, guarderías, entre otras, y comunidades en pobreza alimentaria del área urbana y rural de Nuevo León", señala Castillo Treviño.

"Desde el campo hasta la mesa se pueden tomar diversas medidas para aprovechar mejor la comida, desperdiciar menos y reciclar los sobrantes, no olvidemos que hay millones de hermanos que sufren de pobreza alimentaria".

Ante los datos de la FAO y de los Bancos de Alimentos es urgente crear una cultura en la que se compre el alimento necesario, se midan los platillos que se van a consumir y se comparta, no la comida que sobre, sino la que pueda servir a alguien más.
 

No compres de más

Checa tips de expertos para que adquieras los alimentos que realmente necesites:

- Nunca vayas con hambre a realizar las compras, pues todo se te antojará y llevarás de más.
- Mantén en buen estado tu refrigerador.
- Mide lo que tu familia ingiere en una semana, así evitarás comprar más de lo necesario.
- Si vas a un restaurante sólo ordena lo que vas a comer o, si es bufet, no abuses. Por política lo que queda es desperdicio.
- No sientas pena de pedir en restaurantes lo que resta en tu plato para llevar (no aplica en bufet).
- Al elegir la fruta o verdura, no la maltrates.
- Enseña a tus hijos a no jugar con la comida.
 

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